«Buscar alternativas que permitan que la gente pueda ir a un restorante, a una reunión familiar y pueda tomar una copa de vino…»
Para hablar de la situación actual del sector vitivinícola, dialogamos con industriales y gremialistas como Sergio Etcheverry (Organización Nacional de Vinicultores), Eduardo Viotti y Gerardo Nabune (Asociación Nacional de Bodegueros). Dichos representantes del sector abordaron en profundidad todo lo que tiene que ver con el impacto que generó en el sector la ley de “cero alcohol” en el tránsito y las amenazas que representa la anunciada “ley de alcoholes” que pretende impulsar el Presidente Vázquez.
“Queremos que haya una tolerancia para que nuestro sector no esté pagando las consecuencias del cero alcohol…”
Precisamente en referencia a la ley de “cero alcohol” y sus consecuencias en el sector vitivinícola, Sergio Etcheverry expresó lo siguiente: “El sector vitivinícola está muy preocupado, hemos venido teniendo una baja sensible en lo que son las ventas desde hace un tiempo a esta parte y el último tropezón que tuvimos fue la ley de cero alcohol para conducir que afectó incluso mucho más la venta. Por ejemplo en los restaurantes las ventas han bajado un 70%.
En muchos lugares del departamento de Canelones la gente estaba acostumbrada a tomarse un vaso de vino tanto en el almuerzo como en la cena y eso se ha tenido que dejar y pensamos que no está bien; tenemos que tratar de hacerle entender a las autoridades y estamos en ese camino ya desde hace un tiempo para que se vuelva nuevamente al 0,3% o al 0,5% como se hace en Europa. Aclarar que con esto no se está a favor de dejar tomar indiscriminadamente y que no se multe, pero un 0,3% está dentro de lo razonable y es totalmente tolerable.
Yo creo que hay cosas que no fueron bien razonadas, tu pasás un semáforo en rojo y si tenés la suerte de no matar a nadie te multan pero no te sacan la libreta, en cambio si te agarran con 0,3% de alcohol te sacan la libreta seis meses; por eso estamos tratando de llegar a las autoridades de todos los partidos, sobre todo al Presidente de la República para que se multe como corresponde a quien maneje borracho pero que haya una tolerancia para que nuestro sector no esté pagando esas consecuencias tan bruscas…”
“Incluir el vino en la Comisión de Drogas nos parece demasiado fuerte y contradictorio y un paso erróneo del gobierno…”
Por su parte Gerardo Nabune mostró su preocupación por la anunciada “ley de alcoholes” argumentando que la misma será una piedra más en el camino difícil de sortear: “Esto traerá muchas complicaciones no solamente en el consumidor final sino en la comercialización intermedia; esa ley de alcoholes va a incluir a todo el alcohol en la Comisión de Drogas del país y eso nos parece demasiado fuerte y contradictorio porque si bien el alcohol puede generar una adicción existen muchos estudios a nivel mundial que hablan de que consumir racionalmente una copa de vino favorece a la salud en cuanto al colesterol, la circulación sanguínea y demás; por eso incluir el vino en la Comisión de Drogas nos rechina bastante y creemos que es un paso erróneo del gobierno.
Además hace poco tiempo fue declarado Bebida Nacional, está incluido en la canasta básica y si bien tiene alcohol es una bebida fermentada considerada un alimento, entonces ponerlo como una droga es bastante contradictorio. Le estamos poniendo trabas al consumo del vino y por otro lado estamos fomentando el libre consumo de marihuana que se vende libremente en cualquier farmacia; el vino no proviene de una droga, es un fermentado de una fruta que históricamente en el Uruguay y en el mundo ha sido reconocida como una de las grandes bebidas…”.
“No entiendo esta guerra que se está tomando de parte del gobierno contra el vino…”
En tanto Eduardo Viotti dijo sentirse dolido de que se compare al vino con una droga y según él esta nueva ley que se pretende imponer tiene un fin recaudatorio: “En lo personal creo que todo este circo que se está creando tiene un fin recaudatorio porque de otra manera no entiendo esta guerra que se está tomando de parte del gobierno contra el vino y todas las bebidas alcohólicas. Estoy de acuerdo que tiene que haber una regulación, que a los menores no se les venda alcohol, pero hagan cumplir la ley que ya está, no creen nuevas leyes con una inmensidad de burocracia, con más funcionariado, más impuestos, más vehículos...
A nivel de gobierno se tendría que estar hablando de cómo ayudar a estos granjeros y productores para que puedan producir más barato para que esta mercadería pueda salir al mundo con el prestigio que ya se ganó.
Yo me siento dolido de que se incluya el vino en una Comisión de Drogas, todos quienes están creando este tipo de ley deben haber sido criados con un vasito de vino con un chorro de agua con la comida y nadie salió delincuente ni adicto. Si es un problema social le puedo asegurar que la culpa no la tiene el vino, habría que abordarlo de otra manera.
Yo entiendo que en todo esto hay un gran porcentaje de capricho de ciertas autoridades, hablamos y hablamos pero las cosas cada vez se trancan más. Uruguay hizo un gran esfuerzo para ganar el tannat en el mundo y hoy leo que se le va a poner una contra etiqueta que dice que es un 30% nocivo para la salud…”.
“No nos olvidemos que el vino es la única marca nacional que coloca nueve mil botellas en el mundo todos los días arriba de una mesa y eso no lo hace ningún otro commodity porque la carne no tiene una etiqueta que dice Made in Uruguay. No lo pongamos con las drogas porque estaríamos bajando un escalón grande…”, agregó Sergio.
Por último y consultado acerca de si tienen la esperanza de que esta ley se revierta, Gerardo reveló: “Distintos legisladores nos han abierto las puertas y nos han escuchado, hemos ido con buenos ejemplos y quizás van a escucharnos y limar algún aspecto de esta nueva ley de alcoholes. Necesitamos unirnos más de lo que lo estamos hoy para lograr enfrentarnos con mayor fuerza al gobierno y que nos escuche.
La opinión del Intendente Orsi y el Senador Marcos Carámbula
“La ley de cero alcohol rebotó de una manera inesperada en nuestra vitivinicultura…”
En ocasión del homenaje a Juan Toscanini colocándole su nombre a la Ruta 69; el Intendente de Canelones Yamandú Orsi, hizo referencia al tema de forma breve pero contundente, marcando una clara posición contraria a las autoridades del gobierno nacional –de su propio partido- que han impulsado estas medidas.
En un pasaje de su alocución, Orsi pidió a “los señores legisladores que sigamos pensando en la mejor forma de llevar adelante esto de desestimular que alguien conduzca en estado de ebriedad, pero yo soy partidario de buscar una mejor forma de atender eso porque le rebotó de una manera que no esperábamos a nuestra vitivinicultura.
Debemos sentarnos para ver si lo que estamos haciendo es lo mejor sacándonos las camisetas partidarias y poniéndonos la de Canelones y de la producción”.
“El vino es mucho más que una producción, es cultura, identidad, pertenencia, patrimonio y la tenemos que defender…”
El Senador Marcos Carámbula también se manifestó firme en su posición sobre el tema; y vinculó el homenaje a Toscanini con la defensa del sector, señalando: “El homenaje a Don Juan es a la vitivinicultura nacional, tenemos que entre todos defender la industria vitivinícola que hace a la identidad, a la cultura, a la pertenencia de nuestro departamento, de nuestra esencia, la bodega, la viña… el vino es mucho más que una producción, es cultura, identidad, pertenencia, patrimonio y la tenemos que defender.
Vine con mucha alegría a esta actividad porque la memoria es fundamental, no podemos construir futuro si no sabemos sobre qué hombros se fueron acumulando y aquellos italianos que empezaron en toda esta zona vitivinícola tenían la ciencia de la experiencia, el arte y el amor por la viña, por la elaboración y esa pasión de los pioneros es la que hoy motiva a las nuevas generaciones de enólogos, de vitivinicultores, de granjeros y este ejemplo de Don Juan Toscanini nos empuja hacia el futuro…”
“El vino es un alimento, consumido razonablemente tiene propiedades muy favorables; pero además es identidad, pertenencia, cultura, es la esencia de un departamento…”
Luego consultamos específicamente al senador Marcos Carámbula sobre el perjuicio que está teniendo el sector vitivinícola por la ley de cero alcohol al conducir y la nueva ley de alcoholes que impulsa el gobierno; a lo que respondió: “Está muy bien el combate al tabaquismo, al alcoholismo, al consumo no responsable en materia de drogas y adicciones, pero al mismo tiempo siento que debemos defender al sector; el vino es un alimento, consumido razonablemente tiene propiedades que están claramente documentadas a nivel médico, pero además es identidad, pertenencia, cultura, es la esencia de un departamento, entonces yo creo que hay que estudiar que este proyecto con respecto al alcohol no sea aun más limitante de lo que ya han sufrido las bodegas en materia de consumo.
Yo no digo que se deje de sancionar pero sí buscar alternativas que permitan que la gente pueda ir a un restorante, a una reunión familiar y pueda tomar una copa de vino porque hace a la costumbre, al juntarse con amigos…”
Respecto a la posición a tomar como legislador oficialista, el Senador Carámbula manifestó: “En la bancada del senado nosotros queremos ver bien el tema de la reglamentación de la ley de alcohol justamente para combatir el alcoholismo pero sin caer en extremos que en definitiva induzcan a que se vaya perdiendo el consumo de una bebida como es el vino.
Por último también tenemos acuerdos con los legisladores de nuestra fuerza política de que el vino declarado «Bebida Nacional» por decreto en el período de Mujica lo queremos hacer ley porque eso le da la fortaleza de defender, promover, estimular, educar en el consumo responsable. Hay que estudiar, ver los resultados e incluso cuando votamos la ley se hizo con la condición de que pasado el tiempo se iba a evaluar. Muchos accidentes de tránsito son provocados por el consumo de alcohol pero también hay mucha negligencia, impericia, imprudencia, entonces yo creo que si seguimos con la campaña de prevención podemos modificar o hacer que la sanción sea de otra forma, siempre hablando de 0,3% para abajo”.